- Año: 2021
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Fotografías:Renato Duria
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Un modo de vida. La vida en las antiguas casas paraguayas transcurría en los espacios intermedios que le eran propios. Resguardada de la luz pero en contacto con el aire libre que circulaba, el encuentro y la ronda de tereré acontecían plácidamente. Todo ocurría en la galería, reminiscencias de un tiempo pasado bajo los árboles.
En un barrio próximo al área cívica de Fernando de la Mora, ciudad consecutiva a Asunción, un terreno vacante de 50 m x 23 m con árboles adultos, arroja sombras muy preciadas para el sitio. El pedido de configurar 8 viviendas unifamiliares se suma al desafío de sostener los árboles.
Volver a la sabiduría ancestral, donde la línea entre el afuera y el adentro se difumina y el jardín se concibe en la continuidad de los espacios cotidianos, ¿o es al revés? El planteo de jardines intrínsecos a la vivienda y el estrecho ancho (6.60 m) para cada unidad, determinan la estructura que cualificará, condicionará y posibilitará el habitar. La luz natural se entremete en los espacios y la ventilación los llena de frescura.
Finalmente, 3 patios van alternándose y dando lugar a las estancias sociales en planta baja, mientras que en planta alta, los dormitorios se organizan aprovechando sus bondades. La continuidad espacial se extiende a lo largo y ancho de todo el terreno. La estructura plantea la liberación de la misma al retirar los pilares a los linderos.
Abrir completamente los cerramientos del patio central, termina de configurar la integración del jardín con la vivienda. La sala se maximiza a la par de integrarse con la cocina y el comedor. La continuidad con el patio posterior proporciona comodidades y optimiza la función de los elementos que vienen en torno al asado. Se duplica el espacio culinario, se unifica el comedor y el patio armando una gran sala, un gran comedor. Mientras que arriba, los espacios más introvertidos continúan enlazados con el árbol, disfrutando de las vistas, la luz natural y las brisas.
Una casa, son ocho casas. El conjunto de viviendas se posiciona con 50 m de frente a la ciudad. La decisión de unificar la fachada y seguir la inclinación de la calle responde a la intención de construir una unidad, cada casa como parte de un todo. "Casas Jardines" se presenta como un gesto urbano que busca integrarse con el entorno y contribuir a la calidad del espacio público. Entendiendo un entorno donde las dimensiones de las veredas no son generosas y el caminar puede ser un poco incómodo, se aumenta el retiro, cediendo un espacio a la ciudad. Esta decisión busca mejorar la permeabilidad peatonal y crear un ambiente más amigable para los residentes y transeúntes. Un gesto urbano que canta a la integración, a la armonía entre el espacio público y lo privado. Casas Jardines celebra una forma de vida que se funde con la naturaleza y con las tradiciones de Paraguay.